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Frenos de Disco para MTB - Potencia Máxima en Situaciones Extremas
Los frenos de disco de MTB han demostrado su eficacia desde siempre. Ofrecen una potencia de frenado envidiable y se muestran estables en todo tipo de terreno. De ahí que sean los favoritos de muchos riders de enduro y downhill, disciplinas donde el control de la frenada forma parte del rendimiento (y la salud del ciclista). Preparados para cualquier circunstancia climática, las mejores marcas nos ofrecen componentes compatibles que destacan por la precisión de las tecnologías y la resistencia de los materiales implicados en su fabricación. Leer más
Un vistazo a los frenos de disco disponibles para MTB
Los frenos de disco se han convertido en el estándar dentro del ciclismo de montaña por motivos de justicia: ofrecen un frenado eficaz y seguro en cualquier circunstancia, ya ruedes por un terreno accidentado como embarrado. Su eficacia también ha trascendido a otras modalidades, destacando los frenos de disco para carretera.
Dentro de los frenos de disco para MTB encontrarás dos tipologías claramente diferenciadas: los frenos mecánicos y los hidráulicos.
Los primeros son menos exigentes, con una potencia de frenado limitada y una precisión que puede parecerte inferior a la que ofrecen los frenos hidráulicos. Su funcionamiento es bien sencillo, ya que desde el manillar activas el cierre de las pastillas, que al actuar sobre el disco, reducen la velocidad de la bicicleta.
Los frenos hidráulicos funcionan por medio de un aceite que circula por el cable de frenado. Al frenar, el aceite ejerce presión sobre los pistones que, a su vez, actuarán sobre las pastillas del mismo modo que los frenos mecánicos. El resultado, una pérdida progresiva de velocidad que, en este caso, suele ser más apurada. Otra de sus ventajas es que, al trabajar internamente, no deben preocuparte factores externos como la lluvia que, hasta cierto punto, reducen la efectividad de otros tipos de frenos “exteriores”.
Pistones de freno - ¿Dos o cuatro?
Los kits de frenos de disco para MTB se ofrecen con dos, cuatro o seis pistones. La elección condiciona al frenado y, aunque pueda parecer lo contrario, una mayor cantidad no implica una mejora en la frenada. Como ocurre con todos los componentes de la bicicleta, todo depende de tu forma de conducir.
Los frenos de disco de 4 pistones, una tecnología heredada en la industria del motor, reparten sus pistones a ambos lados de la pastilla de freno. La superficie de contacto con el disco aumenta y esto deriva en una mayor potencia y precisión de frenado. Así, ejerciendo la misma presión en la maneta del freno, obtienes resultados superiores. Por otra parte, al incluir más pistones, el freno reparte su esfuerzo y desgaste. Los frenos de 4 pistones suelen ser algo más pesados y requieren de más líquido de freno en el caso de los hidráulicos. La mejora de prestaciones también suele repercutir en el precio.
Los frenos de disco de 2 pistones, o sea, la gran mayoría, destacan por su peso inferior, su versatilidad y por su precio, bastante inferior. En su contra tienen todo lo que sus hermanos ofrecían como ventaja, como mayor esfuerzo a la hora de accionar la maneta de freno, un mayor desgaste y una tendencia a sobrecalentarse en terrenos que precisan de frenadas constantes.
Los frenos de disco de 6 pistones son menos habituales al no estar al alcance de todos los presupuestos e implicar unos gramos adicionales. Como puedes imaginar, la adición de pistones trabaja por una frenada más precisa, una mayor disipación del calor e, importante, la longevidad del disco de freno. Su presencia en el mercado es limitada, no todas las marcas los incluyen en su catálogo o los ofrecen para ambas ruedas.
Tecnologías y materiales - El futuro de los frenos de disco MTB
Las marcas ponen todo su empeño en mejorar sus modelos de freno de disco. La principal medida es mejorar los materiales que los componen, con una fuerte presencia del aluminio en los modelos más básicos y la dominancia del carbono en aquellos orientados al uso profesional. La reducción de peso es indiscutible, así como la facilidad y seguridad de uso.
Aunque cada marca ofrece un rango de compatibilidad distinto, verás que las tecnologías utilizadas en cada uno de ellos ofrece prestaciones similares. Atendiendo a los datos proporcionados por los profesionales en competición, ahondan en la ergonomía de la palanca de freno, con una tendencia a acortarla sin sacrificar su facilidad de empleo y de instalación, donde cada vez intervienen menos herramientas externas.
Por su parte, los pistones son magnéticos, una propiedad que perfecciona el ajuste de la pastilla de freno en la pinza y facilita el posterior cambio.
Los materiales de los kits de frenos de disco de MTB alcanzan un nivel de complejidad tal que las aleaciones de aluminio parecen prehistóricas. Al emplear polímeros de alta tecnología y fibras de carbono o incluso de vidrio, las mejores marcas ofrecen la misma resistencia a la tracción y al desgaste con llamativas reducciones de peso de hasta el 50%. La clave es distribuir los materiales con eficiencia, allí donde se los necesita, concentrando su densidad allí donde la estabilidad térmica es más necesaria.
Este tipo de frenos también lo pone fácil durante el mantenimiento, agilizando su sangrado para que hasta un iniciado pueda enfrentarse sin agobios a su limpieza.
Consejos de compra para los frenos de disco MTB
Las principales recomendaciones al comprar un freno de estas características vienen del sentido común, de contrastar los componentes de tu bici para que todo encaje. A no ser que esta venga configurada de serie, con frenos ya llenos y purgados, atiende al diámetro máximo que admite el cuadro y la horquilla para el disco de freno.
Si te surgen problemas, una solución es acortar el cable y dejarlo con la longitud deseada, eso sí, midiendo con exactitud cuánto vas a necesitar, ya que, ¡no hay vuelta atrás!
Algunos frenos son universales y pueden emplearse tanto en la parte trasera como la delantera de la bici, lo que te permite distintas configuraciones y un rendimiento distinto según la disciplina que practiques.
Atiende también a los extras que el freno incluya, ya que no todos incluyen adaptadores o vienen con los discos de freno. Te bastará con contrastar su compatibilidad o adquirirlos directamente de la misma marca.